Registros akáshicos, Sanación del Alma
"El Akasha, la Luz Astral, puede definirse como el Alma Universal, la Matriz del Universo, el Mysterium Magnum del cual todo cuanto existe ha nacido por separación o diferenciación. Es la causa de la existencia; llena todo espacio infinito...es el mismo espacio".
H.P. Blavatsky.
La palabra akáshico deriva de Akaśa, término del antiguo idioma sánscrito de la India, que significa ‘éter’, espacio o energía universal que penetra todo el universo y es el vehículo que transporta el sonido y la vida.
Akasha significa: "archivo de todas la experiencias del alma".
Es Física Cuántica se sabe que para el alma el tiempo lineal no existe, sino que es circular.
Para el alma no existe pasado, presente y futuro., por ende en el Registro Akáshico se encuentra la información total de las experiencias de esos 3 tiempos lineales que vivenciamos como humanos.
Somos conciencia, tenemos conciencia en el cuerpo y en el alma. Esa conciencia está conectada con la conciencia del Universo.
El alma guarda la información de todas las encarnaciones y cada vez que adopta un cuerpo físico trae el bagaje de emociones no resueltas, aprendizajes, dones, carismas y virtudes con ella y nos acompaña en cada etapa.
En el akasha está “guardada” toda la historia de planeta de todos los tiempos, las historias personales de cada Ser que lo haya habitado, todos los sucesos, situaciones, aprendizajes, emociones, contribuciones, evoluciones de cada Ser.
Nuestro propio nombre es un sonido o tono propio que nos identifica, eso nos conecta con la información álmica personal.
Antes de encarnar y en planos superiores pactamos nuestro nombre junto a los Seres –Superiores de nuestros padres, es como si el alma se los susurrara al oído, de allí deriva nuestra impronta energética que se desarrollará en esta encarnación, el paquete de datos personal.
Recurrir a Los Registros akáshicos, donde se encuentra asentado la totalidad de lo acontecido en el planeta y todo lo que fue, es y será; nos conecta con partes nuestras que en este momento están como perdidas, olvidadas.
Permitir que la información adecuada para nosotros nos llegue desde ese lugar y de manera sagrada hará que se disuelvan los bloqueos en esta vida, se trasciendan las lecciones en lugar de transitarlas, se nos recuerde nuestro papel único e irrepetible como protagonista de la vida, se dispense el karma que aflore en esa sesión expandiendo de esa manera luz a quién realiza la consulta y a el entorno involucrado en dicho karma. Se nos revelará la “verdad” que subyace en cada situación, en cada vínculo.
Desde ese entendimiento calibrado en un orden superior de luz, se corren los obstáculos del camino y la liviandad del Ser nos acompaña.
A partir de una oración sagrada, se accede a los registros del consultante y sus preguntas son respondidas a través de los guías de planos superiores.
